Día 8 - Miercoles 9 de Mayo - Ferrie de Barcelona a Savona 


Después de esperar cerca de 2 horas para subir al ferry dejamos nuestras bicicletas con los autos,  le digo a Pía que amarremos las alforjas a las bicicletas, ella me dice que las protegerá con luz y que tenemos que confiar que las cosas van a estar bien....ok, está bien ( a regañadientes).  Al subir le preguntamos a una personna del barco donde debemos ir, nos pregunta: 

-"Tienen camarote"

 - "No"-, respondemos....

-"Vayan, para allá, el pasillo al fondo".  


Entramos a la sala de butacas, donde duerme la gente que no pagó un camarote, el lugar, completamente oscuro,  gente durmiendo, se ven túnicas, teteras, y ropas árabes,  nos enconntramos con unas butacas y nos acomodamos.

 La atmósfera del lugar se siente  como si fuéramos inmigrantes  ilegales.   Acostados entre 3 butacas y ya cansados, nos dormimos, o al menos lo Intentamos.


Ya está claro y nos despertamos cada uno medio atontado de no haber dormmido mucho, Pía está mareada y no se siennte bien, yo,  aun sin poder despegarme del asiento,  la escucho sonreir y dar las gracias, me volteo para verla y me fijo que sonrie con un tecito en la mano, un marroquí la vio con tan mala cara que le trajo dos tacitas de te 

-"Un té con especies calentito"!!no podía despertar mas feliz, y le ayudó a sacarse el mareo.


Que prejuciosa es la mente ante un entorno desconocido, de sentirnos intimidados en un ambiente tan distinto, un pequeño regalo de alguien, al cual ni si quiera le entendimos lo que decía nos cambia la mañana. 


Después de estar en la sala una hora medio atontados vamos a darle una vuelta al barco y nos damos cuenta que podriamos haber dormiido enn cualquier parte del barcco, hay un monton de viajeros que estaban ccon sus sacos durrmiedo en los corredores del ferrie.


Aprovechamos el dia en ordenar cosas, planificar lo que viene, cargar celulares, Luego en la tarde nos volvemos a encontrar con Vincenzo y Oxana, conversamos de mucha cosas y después de dos horas conversando nos invitan a su casa, en Cesena, aun no llegamos a Italia y ya tenemos un lugar donde llegar.

Ya son las 9 de la noche  y vamos a ver si nuestras alforjas están o se las robaron, o no hay ni bicicletas.  

Finalmente.... Tranquilidad y alegría, todo está en su lugar,  pero aun así Oxana nos dio una buena frase cuando le contamos que habíamos dejado nuestro equipo abajo:

" Confidenza va bene pero prima prudenza"



Vamos a partir cuando un tipo en moto me mira y dice algo que no entiendo, otro tipo me mira y dice lo mismo, y de repente Pía mira y dice: 

-"Tu neumático de atrás, está pinchado"-, mientras  la gente del ferry nos dicen que debemos salir!


Intento inflar y nada,  no tenemos tiempo para cambiar la cámara, asi que con la bici a cuestas, corriendo. 


Con mas espacio en un rincón, cambiamos la cámara,  buscamos la ruta,  7 km el camping mas cercano.

Llegamos, montamos carpa, ducha y muy cansados a dormir, buenas noches.